Santiago de Compostela acoge la mayor compilación de obras de Joseph Beuys en España

El autor alemán intervino como piloto de combate en la II Guerra Mundial, lo que incidió en toda su vida y obra artística con una «marcada filosofía y actividad creativa» que, según Porto, plasma la exposición. Asimismo, un recorrido de cinco ámbitos temáticos tratará la mitología personal del autor, como el traje de fieltro o los trineos; su idea de la energía como capacidad de cambio social, pues empleó materiales como miel, cera, aceite; su aportación a la creación de una conciencia ecológica y de reforma social; y el papel que tuvo en el mundo del cine y la oratoria.
Biografía
Joseph Beuys nació el 12 de mayo de 1921 en Krefeld. Durante la guerra fue piloto. Después estudió escultura en la Kunstakademie de Düsseldorf, donde también fue profesor de 1961 a 1972. En 1953 presenta sus primera obras, entre ellas su famoso retrato de Leonardo "Gioconodología". El 1961 es elegido en la Academia Nacional de Arte de Düsseldorf catedrático de escultura monumental, donde ejerce la docencia con extraordinario carisma, fascinando a los estudiantes. La enseñanza pasa a ser un elemento central de su teoría artística. En los años 70 y 80 desarrolló actividades en todo el mundo. Sus obras fueron exhibidas en la Bienal de Venecia, el Guggenheim Museum de Nueva York y el Seibu Museum of Art en Tokio. En 1979 se presentó como candidato de Los Verdes para el Parlamento Europeo. Murió el 23 de enero de 1986 en Düsseldorf.
Para Beuys, "todo ser humano es un artista", y cada acción, una obra de arte. Con esa concepción ampliada del arte despertó revuelo y desató debates en todo el mundo. Las obras de arte eran para Beuys tan efímeras como la vida. Por ello nunca quiso crear obras para la eternidad, sino dar impulsos para la reflexión.
Sus materiales preferidos fueron la grasa y el fieltro. Lo que a primera vista puede parecer arbitrario, en realidad no lo es. En 1943, su avión Stuka es derribado sobre Crimea. Beuys sufre graves heridas, pero vive. Un grupo de nómadas tártaros lo encuentra, inconsciente, y lo salva de la muerte segura untando sus heridas con grasa animal y protegiéndolo del frío con fieltro: una experiencia que marcaría el resto de su vida, como relata en su autobiografía. Beuys tomó elementos mitológicos, filosóficos, médicos y religiosos en su intento utópico de ayudar a crear una sociedad más humana. Muchos de sus dibujos, plásticas, acciones y conferencias contienen referencias al mundo de la medicina, tanto popular como académica. En su último periodo creativo, Beuys también analizó intensamente el chamanismo, para el artista una filosofía natural que evoca un mundo originario en el que todos los seres viven en armonía. En ese sentido, Beuys fue un adelantado de su tiempo, ya que veía en el chamanismo un enfoque médico integral, que armoniza a todo el ser: su cuerpo, su espíritu y su alma.
R.