Se cumplen 50 años del bautizo de fuego del Instituto Cultural Español de Dublín
El Instituto Cultural Español acababa de ser inaugurado por el Ministro de Educación de Irlanda, Mr. Richard Burke, unos días antes, el 11 de febrero de 1974.
Los principales periódicos del país llevaron como noticia destacada en su portada la protesta ante el Instituto, hecho del que no informaron los medios de comunicación de España. Una persona llamo al periódico Irish Press de Dublín, en representación del Grupo anarquista Primero de Mayo, para informar que habían sido los responsables para protestar por la ejecuación del anarquista español.
En mi calidad de director del Instituto me encontraba en la ciudad de Cork, a 4 horas de distancia en automóvil de Dublín en el sur de la isla, asistiendo al congreso que tenía lugar anualmente para los profesores y alumnos de los departamentos de Estudios Hispánicos de todas las universidades de Irlanda.
Fui informado al día siguiente de lo ocurrido por el jefe del departamento de Filología española de la universidad de Cork así como que mi familia, que se encontraba en la planta baja del edificio, no había sufrido daños personales.
Cuando España alquiló, en 1971, el edificio de Northumberland Road nº58 de Dublín para sede el Instituto Cultural Español reservó la planta baja para vivienda de su Director. A raíz del atentado contra el Instituto, la Embajada de España sugirío la conveniencia de que se trasladara la residencia del Director y un años más tarde se realizó el traslado, quedando la planta baja destinada a cafetería de alumnos, almacen y posteriormene como galaría de arte para exposiciones de arte español e iberoamericano.
Los jefes de los departamentos de Estudios Hispánicos de las unversidades Trinity College y University College de Dublín recogieron firmas para protestar por el ataque al Instituto Cultural Español, así como contra la ejecución de Salvador Puig Antich junto a otra persona en Barcelona que, asímismo, incluyeron en las cartas enviadas a los medios de comunicación y publicadas por los principales periódicos de Irlanda.
Personalmente, recibí cartas interesándose por mi familia, entre las que estaban una de John de Courcy Ireland, destacado historiador, profesor de español y miembro del Partido Laborista irlandés así como de una religiosa profesora de español, interesándose por el estado del material audiovisual que prestaba el Intituto a los centros que impartían español a consecuencia del fuego.
En el cincuenta aniversario de la inauguración oficial del Instituto Cultural Español de Dublín, adscrito al Instituto Cervantes desde 1991, y cuya inauguracicón oficial tuvo lugar 22 días antes de la ejecución en Barcelona de Salvador Puig Antich junto a otra persona, el 2 de marzo de 1974, fué noticia en España y otros paises su ejecución. El ataque al Instituto Cultural Español por su ejecución, sus consecuencias, así como la carta de protesta enviada por los dos departamentos de Estudios Hispánicos de las dos citadas universidades irlandesas y publicada por los medios de comunicación fué noticia en Irlanda pero no en España. Solamente se enteraron los familiares del director residentes en España.
Los principales periódicos del país llevaron como noticia destacada en su portada la protesta ante el Instituto, hecho del que no informaron los medios de comunicación de España. Una persona llamo al periódico Irish Press de Dublín, en representación del Grupo anarquista Primero de Mayo, para informar que habían sido los responsables para protestar por la ejecuación del anarquista español.
En mi calidad de director del Instituto me encontraba en la ciudad de Cork, a 4 horas de distancia en automóvil de Dublín en el sur de la isla, asistiendo al congreso que tenía lugar anualmente para los profesores y alumnos de los departamentos de Estudios Hispánicos de todas las universidades de Irlanda.
Fui informado al día siguiente de lo ocurrido por el jefe del departamento de Filología española de la universidad de Cork así como que mi familia, que se encontraba en la planta baja del edificio, no había sufrido daños personales.
Cuando España alquiló, en 1971, el edificio de Northumberland Road nº58 de Dublín para sede el Instituto Cultural Español reservó la planta baja para vivienda de su Director. A raíz del atentado contra el Instituto, la Embajada de España sugirío la conveniencia de que se trasladara la residencia del Director y un años más tarde se realizó el traslado, quedando la planta baja destinada a cafetería de alumnos, almacen y posteriormene como galaría de arte para exposiciones de arte español e iberoamericano.
Los jefes de los departamentos de Estudios Hispánicos de las unversidades Trinity College y University College de Dublín recogieron firmas para protestar por el ataque al Instituto Cultural Español, así como contra la ejecución de Salvador Puig Antich junto a otra persona en Barcelona que, asímismo, incluyeron en las cartas enviadas a los medios de comunicación y publicadas por los principales periódicos de Irlanda.
Personalmente, recibí cartas interesándose por mi familia, entre las que estaban una de John de Courcy Ireland, destacado historiador, profesor de español y miembro del Partido Laborista irlandés así como de una religiosa profesora de español, interesándose por el estado del material audiovisual que prestaba el Intituto a los centros que impartían español a consecuencia del fuego.
En el cincuenta aniversario de la inauguración oficial del Instituto Cultural Español de Dublín, adscrito al Instituto Cervantes desde 1991, y cuya inauguracicón oficial tuvo lugar 22 días antes de la ejecución en Barcelona de Salvador Puig Antich junto a otra persona, el 2 de marzo de 1974, fué noticia en España y otros paises su ejecución. El ataque al Instituto Cultural Español por su ejecución, sus consecuencias, así como la carta de protesta enviada por los dos departamentos de Estudios Hispánicos de las dos citadas universidades irlandesas y publicada por los medios de comunicación fué noticia en Irlanda pero no en España. Solamente se enteraron los familiares del director residentes en España.
José Antonio Sierra Lumbreras