María Rubal entra en los hogares con bastidores de distintas figuras
María Rubal soñó un día con el cuadro perfecto. Realizado con figuras cosidas a la superficie y en forma circular, la artista se despertó al día siguiente con la misión de encontrar la manera de materializar lo que por la noche ideara su subconsciente. En versión redondeada, al igual que cuando piensa en amueblar las esquinas de su casa y tiende a evitar los acabados puntiagudos, la joven encargó bastidores sin vértices y les puso las telas de lienzo para crear fondos lisos de colores amables.
Para las criaturas que en su sueño colgaban de la base, Rubal ideó un barro moldeable, del que salieron pájaros, corazones y manzanas, además de las galletas, como ella las llama, que son círculos que rematan en pequeñas ondulaciones como las que se hacen al horno.
Después, las cosió al cuadro con pliegues y sin ellos. Para darle un toque natural pero sin dejar de ser diseños simples. Que gustan desde el primer momento. De este modo, la primera de sus creaciones llenó un vacío en la pared de su casa que fue la atracción de familiares y amigos. “Todos me invitaron a que siguiera haciendo”, comenta.
Diversidad
Rubal presentaba este fin de semana en el showroom de la tienda Peka’s World sus primeras nueve composiciones. Varían por el tamaño y la figura que dibuja la masilla. Así se pueden ver corazones, jaulas de las que salen pequeños jilgueros o mariposas.
Las obras viajaban ayer a Ourense en un recorrido que seguirá en manos del comercio coruñés para hacerse mayor. Además, la artista pone su creatividad a disposición del cliente.
Ella se ofrece a construir la circunferencia en las tonalidades y con los motivos que el consumidor guste. Para ello, dispone de la web www.marabilla.com, donde se puede consultar todo lo hecho hasta el momento.
El precio depende de las horas empleadas y las dimensiones del círculo. Con la única condición de que los materiales sean de buena calidad. Porque la diseñadora busca la inmortalidad de sus criaturas, elige siempre buena materia prima para que sigan siendo puntos durante mucho tiempo en la pared. De esta manera, lucha por el personalismo en la decoración del hogar. Escapa de la era de la industrialización para darle un toque a cada casa.
En este sentido, Rubal se considera inconformista. No sigue las leyes y huye de lo de siempre para innovar en un mercado que está recibiendo muy bien a sus pequeños círculos de colores. Apostando por darle al mundo un sello propio. Amable y divertido.